ZAPATILLAS DE CLAVOS PARA CORRER EN PISTA

Existe vida más allá de las zapatillas de running, y son las zapatillas de clavos, también conocidas como zapatillas de atletismo o de pista. A muchos corredores, cuando se enfrentan al tartán por primera vez, les sorprende descubrir que es necesario este tipo de calzado. Y es que para alcanzar esa velocidad y explosividad requerida – sobre todo en distancia cortas y medias – es necesario un calzado que ofrezca la máxima reactividad y respuesta, algo que solo lo vamos a encontrar en las zapatillas de clavos.

CARACTERÍSTICAS DE LAS ZAPATILLAS DE CLAVOS

¿Cómo tiene que ser una buena zapatilla de pista? Si ya llevas años participando en pruebas de pista o eres un experto en la materia puedes obviar directamente este apartado, porque estamos seguros ya lo sabrás. Las zapatillas de clavos están diseñadas para ir lo más rápido posible. De modo que no esperes ni una gran comodidad ni amortiguación, sino una reactividad superior para conseguir la máxima eficiencia.

Así, una buena zapatilla de clavos debe cumplir:

✔ Tener un agarre y una tracción excepcional.

✔ Buen ajuste, la zapatilla de encajar a modo de segunda piel.

✔ Ofrecer la máxima reactividad y respuesta gracias al “efecto palanca” que proporciona la placa de la zapatilla cuando se flexa.

CUÁNDO USAR LAS ZAPATILLAS PARA PISTA

No, las zapatillas de clavos no son para usarlas todos los días. Este tipo de zapatillas, debido a su falta total (o casi) de amortiguación, son muy demandantes muscularmente y se reservan únicamente para las competiciones o entrenamientos de calidad muy puntuales.

Además, hay que considerar que va a costar más recuperar y que las probabilidades de lesión van aumentar en gran medida. En este sentido, para disminuir el riesgo de lesión es muy conveniente que la musculatura inferior esté bien trabajada (trabajo de fuerza o fortalecimiento) y disponer de una técnica de carrera eficiente (ejercicios de técnica de carrera).

TIPOS DE ZAPATILLAS DE CLAVOS

Zapatillas de clavos para pruebas de velocidad

Entre las pruebas de velocidad se engloban las pruebas más cortas, como los 100, 200 y 400 metros, o las vallas. Al ser necesario desarrollar la máxima velocidad, las zapatillas de clavos para estas pruebas se caracterizan por tener una placa muy rígida que, al flexar, produzcan una gran reactividad gracias al efecto catapulta. Lógicamente, cuanto menor sea la distancia más rigidez en la placa será necesaria. Así, las zapatillas específicas para 100 o 200 metros tienen una placa más dura en comparación con distancias superiores, como pueden ser los 200 o 400 metros.

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Zapatillas de clavos para media distancia

Tradicionalmente se consideran pruebas de media distancia o medio fondo las distancias que van desde los 800 a los 1500 metros. Este tipo de zapatillas disponen de una placa algo más flexible que en los modelos de velocidad y, algunos modelos, disponen incluso de algún que otro elemento amortiguante. Sea como fuera, la ligereza, el ajuste y una buena reactividad son características muy a tener en cuenta a la hora de elegir zapatilla para medio fondo.

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Zapatillas de clavos para larga distancia

Las zapatillas de clavos en las pruebas de larga distancia – 3.000, 5.000 y 10.000 metros – se caracterizan por tener una placa más flexible y más amortiguación que les permita llegar con garantías a la parte final de la carrera, sobre todo en para las distancias superiores. En cualquier caso, el ajuste, la ligereza y el agarre siguen siendo las principales preocupaciones de los corredores.

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PREGUNTAS FRECUENTES

¿Existe una zapatilla de clavos que valga para múltiples distancias?

Todas las marcas disponen de algún modelo de zapatilla más versátil, destinado a los corredores más noveles o indecisos que todavía no tienen claro en qué distancia centrarse. Estas zapatillas se suelen caracterizar por una parte superior más estructurada y una placa más flexible que ofrece una mayor sensación de confort. A pesar de no ser tan reactivas, eficientes o ligeras como otros modelos más específicos, habitualmente tienen un precio más contenido y una mayor durabilidad.

¿Se puede competir en pista sin usar zapatillas de clavos?

Sí, por supuesto. El uso de una zapatilla de clavos en competición es recomendable siempre y cuando consigamos correr más respecto a las zapatillas voladoras. Considerando que el beneficio de este tipo de zapatillas viene dado por la capacidad de flexar la placa,  si no corremos los suficientemente rápido para conseguir esa flexión no tiene ningún sentido usarlas.

¿Qué clavos tengo que usar en cada distancia?

La longitud de los clavos dependerá de la distancia a la que nos enfrentemos: a menor distancia mayor longitud de los clavos. Para las pruebas de velocidad suele haber mucho consenso y todo el mundo emplea clavos de 6 mm. En el mediofondo dependiendo del atleta y de la distancia se emplean clavos de 3 o 6 mm. Mientras que en la larga distancia se corren con clavos de 3 mm o incluso sin ellos.

¿Tengo que entrenar también con las zapatillas de pista?

Debido al gran desgaste muscular que provocan las zapatillas de clavos lo más recomendable es emplearlas únicamente en las competiciones y en los entrenamientos de más calidad, como puede ser una sesión de series rápidas y de poco volumen. Además, para preparar distancias largas como los 10.000 metros la mayoría de las veces no es necesario emplear clavos en los entrenamientos, unas voladoras son perfectamente válidas.

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